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Tiempo mío

                                                  A Ramón López Velarde


La vida dura
las estaciones se suceden
una          tras otra
casi hipnótica
duración del instante
en que anduve
sonámbula
buscando a los astros
su fuego ardiente
y el crepitar del pájaro
que muere en sí mismo
                    sin encontrarse

y comprender
que cada huella
de la corteza del árbol
necesitó 33 días
para nombrarte
para verte girar
          perlas de luz

De llama y agua
los hombres
          las yeguas
          la ondulación de los segundos

Me esfumaré bajo tus pies
viento que me ves nacer
dispersando este rompecabezas
          que soy
          que vivo

Tiempo que verás mi fin
en el centro de tu ondulación
          respiro



De: El amante y al espiga

Poema proporcionado por la autora


LETICIA LUNA




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