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25 poemas aleatorios en audio

 
   Amo esta forma moviente... Amo esta forma moviente... de Homero Aridjis

   Homero Aridjis
      Por Homero Aridjis    
primeros versos

Amo esta forma movienteeste universo este cuerpo del cuerpo por su corazón rojo santuario la intensidad no cesa el infinito quema en llama blanca el amor cierra sus ojos y los astros se encienden como ciervos que saben la dirección del viento amo esta corporeidad...

 
   Falsa elegía Falsa elegía de Rosario Castellanos

   Rosario Castellanos
      Por Carmen Farías    
primeros versos

Compartimos sólo un desastre lento Me veo morir en ti, en otro, en todo Y todavía bostezo o me distraigo Como ante el espectáculo aburrido. Se destejen los días, Las noches se consumen antes de darnos cuenta; Así nos acabamos. Nada es. Nada está. Entre el alzarse y el caer del párpado...

 
   Desamor Desamor de Rosario Castellanos

   Rosario Castellanos
      Por Rosario Castellanos    
primeros versos

Me vio como se mira al través de un cristal o del aire o de nada. Y entonces supe: yo no estaba allí ni en ninguna otra parte ni había estado nunca ni estaría. Y fui como el que muere en la epidemia, sin identificar, y es arrojado a la fosa común. De: Poesía no eres...

 
   Cuando miro tus ojos Cuando miro tus ojos de Fayad Jamís

   Fayad Jamís
      Por Fayad Jamís    
primeros versos

Cuando miro tus ojos veo en ellos la Patria no puedo separarlos de esa imagen tan clara. Ellos son como el viento que hace temblar las ramas tú me miras y entonces amanece en las Guásimas. Quédate para siempre en mi noche, mi lámpara mi amor tiene en tus ojos su alimento...

 
   Has visto cómo crecen las plantas... Has visto cómo crecen las plantas... de Jaime Sabines

   Jaime Sabines
      Por Jaime Sabines    
primeros versos

Has visto cómo crecen las plantas? Al lugar en que cae la semilla acude el agua: es el agua la que germina, sube al sol. Por el tronco, por las ramas, el agua asciende al aire, como cuando te quedas viendo el cielo del mediodía y tus ojos empiezan a evaporarse. Las plantas crecen de un día a otro...

 
   Canto (I) Canto (I) de Mario Bojórquez

   Mario Bojórquez
      Por Mario Bojórquez    
primeros versos

Con la pesada llaga ya sin cuerda en el cuello Con el dogal vacío y la enhiesta pesadumbre que no implora ya más Que no tunde ya el hueso carcomido, ni la visión postrera Aquí cerca del junto Me pongo a recordar muelles del aire donde atracó la sombra de otro tiempo...

 
   Más que vaso -tambíen- más providente... (Muerte sin fin) Más que vaso -tambíen- más providente... (Muerte sin fin) de José Gorostiza

   José Gorostiza
      Por José Gorostiza    
primeros versos

Mas qué vaso también más providente! Tal vez esta oquedad que nos estrecha en islas de monólogos sin eco, aunque se llama Dios, no sea sino un vaso que nos amolda el alma perdidiza, pero que acaso el alma sólo advierte en una transparencia acumulada que tiñe la noción de Él, de azul...

 
   Nocturno de invierno Nocturno de invierno de José Juan Tablada

   José Juan Tablada
      Por Sergio de Alva    
primeros versos

Mi inconsolable soledad se asombra, pues no sé en la ansiedad con que deliro si no te puedo ver por tanta sombra o si es de noche porque no te miro... ¡Pues siempre que tú llegas, la tiniebla disipas, ya tu voz ya tu mirada el silencio de músicas se puebla y cae sobre la noche la...

 
   A una estatua A una estatua de Alí Chumacero

   Alí Chumacero
      Por Alí Chumacero    
primeros versos

Cesa tu voz y muere sobre tus labios mi alegría. No habrá palabra que en tu piel levante ni un incierto sabor de brisa oscurecida como el recuerdo que en mis ojos deja el paso de tu aliento, porque vives inmersa en tu silencio, impenetrable a mis sentidos...

 
   Nazareth Nazareth de Rosario Castellanos

   Rosario Castellanos
      Por Rosario Castellanos    
primeros versos

Descendiendo a la cueva en que el Arcángel hizo su anuncio, pienso en María, ese vaso de elección. Como todos los vasos, quebradizo. Como todos los vasos, demasiado pequeño para el destino que se vierte en él...

 
   Que no me quiera Fabio al verse amado... Que no me quiera Fabio al verse amado... de Sor Juana Inés de la Cruz

   Sor Juana Inés de la Cruz
      Por Guadalupe (Pita) Amor    
primeros versos

Que no me quiera Fabio al verse amado es dolor sin igual, en mi sentido; mas que me quiera Silvio aborrecido es menor mal, mas no menor enfado. ¿Qué sufrimiento no estará cansado, si siempre le resuenan al oído, tras la vana arrogancia de un querido, el cansado gemir de un desdeñado?...

 
   Tesoro concedido gota a gota... Tesoro concedido gota a gota... de Salvador Novo

   Salvador Novo
      Por Salvador Novo    
primeros versos

Tesoro concedido gota a gota: el perfume a la flor, la luz a una sorprendida mirada que la cuna sombra, siglos incógnitos derrota. Férvido manantial, la vida brota dilapidada en horas su fortuna; fulge la noche lágrima de luna, se contiene la música en la nota...

 
   Pero en las zonas ínfimas del ojo... (Muerte sin fin) Pero en las zonas ínfimas del ojo... (Muerte sin fin) de José Gorostiza

   José Gorostiza
      Por José Gorostiza    
primeros versos

Pero en las zonas ínfimas del ojo no ocurre nada, no, sólo esta luz ay, hermano Francisco, esta alegría, única, riente claridad del alma. Un disfrutar en corro de presencias, de todos los pronombres antes turbios por la gruesa efusión de su egoísmo de mí y de Él y de nosotros tres...

 
   Muerte hilandera Muerte hilandera de Carmen Alardín

   Carmen Alardín
      Por Carmen Alardín    
primeros versos

Cuando los huracanes son exclusivamente tuyos, cuando tienen tu sello y las tormentas se unen únicamente a ti, cuando los huracanes muerden las carreteras y hacen flotar la intimidad sin prejuicio alguno ni resto de virtud. Entonces, yo voy creciendo a fuerza de invocarte...

 
   Agua nocturna Agua nocturna de Alberto Ruy Sánchez

   Alberto Ruy Sánchez
      Por Alberto Ruy Sánchez    
primeros versos

La noche que guardas en la mano, la noche que abres para acariciarme, me cubre como un manto navegable. * Voy hacia ti, lentamente. En la noche, el brillo de tus ojos me conduce. Veo tu rostro en ese sueño. Veo tu sonrisa. Me dices algo que no entiendo. Te ríes. Entonces me lo explicas...

 
   El recuerdo El recuerdo de Carlos Pellicer

   Carlos Pellicer
      Por Carlos Pellicer    
primeros versos

En las horas en que el paisaje se vacía todo se lo han llevado las nubes , los objetos de familia, las palabras íntimas. En una soledad de todas las cosas, ciego, mudo, sólo me quedan unos cuantos dedos para tocar las piedras...

 
   El pinzón real El pinzón real de Alberto Blanco

   Alberto Blanco
      Por Alberto Blanco    
primeros versos

Un salmo cadencioso peina el bosque De raya en medio: la luz solar sobre las hojas y el abrigo de la sombra en un costado. Hay un eco ancestral en la salmodia de los pinzones reales: el otoño tiene sus plumas propias y el color de los corazones que se despiden. Caen las hojas y se...

 
   Las vírgenes del viento Las vírgenes del viento   de Manuel Ponce

   Manuel Ponce
      Por Manuel Ponce    
primeros versos

Al viento, si, sus manos van al viento. Su mano diseminando copos de Verano. Blancas las manos, blanco el pensamiento. Nada cosecharán: uno por ciento del grano vano. Llegaba el sol, milano, a sorberse los copos con su aliento. Estatuas de sal, frías, sobre desiertas latitudes se quedarán para escarmiento...

 
   Su trenza Su trenza de Amado Nervo

   Amado Nervo
      Por Enrique Rambal    
primeros versos

Bien venga, cuando viniere, la Muerte: su helada mano bendeciré si hiere... He de morir como muere un caballero cristiano. Humilde, sin murmurar, ¡oh Muerte!, me he de inclinar cuando tu golpe me venza; ¡pero déjame besar, mientras expiro, su trenza! ¡la trenza que le corté y que, piadoso, guardé...

 
   El pobre El pobre de Rosario Castellanos

   Rosario Castellanos
      Por Rosario Castellanos    
primeros versos

Me ve como desde un siglo remoto, como desde un estrato geológico distinto. Del idioma que algunos atesoran le dieron de limosna una palabra para pedirle su pan y otra para dar gracias. Ninguna para el diálogo. El domador, con látigo y revólveres, le enseña a hacer piruetas...

 
   Vuelvo a ti soledad... Vuelvo a ti soledad... de Carlos Pellicer

   Carlos Pellicer
      Por Carlos Pellicer    
primeros versos

Vuelvo a ti, soledad, agua vacía, agua de mis imágenes, tan muerta, nube de mis palabras, tan desierta, noche de la indecible poesía. Por ti la misma sangre tuya y mía corre el alma de nadie siempre abierta. Por ti la angustia es sombra de la puerta que no se abre de noche ni de día...

 
   Mi padre siempre trabajó en lo mismo... Mi padre siempre trabajó en lo mismo...  de Fabio Morábito

   Fabio Morábito
      Por Fabio Morábito    
primeros versos

Mi padre siempre trabajó en lo mismo. Él tan voluble, que entró y salió de tantas compañías, toda la vida trabajó en el plástico, tal vez porque nació donde no había montañas, en un país que no era el suyo, y lo sedujo una materia así, desmemoriada de su origen, que sabe regresar a su contorno...

 
   La virgen trajinera La virgen trajinera   de Manuel Ponce

   Manuel Ponce
      Por Manuel Ponce    
primeros versos

A la Madre luciente, la virgen alba, llevo las flores, flores de mi chinampa. ¡Ay, agua dulce! ¡Ay, agua amarga! La superficie mece la frágil gracia de florecillas, flores recién cortadas. ¡Ay, agua dulce! ¡Ay, agua amarga! En mis brazos y ensueños el niño nada por agua dulce por agua amarga...

 
   Anti-yo Anti-yo de Tomás Segovia

   Tomás Segovia
      Por Tomás Segovia    
primeros versos

No soy el que yo digo Soy el que dices tú Me traiciono por ése Mi doble que el amor y la impiedad figuran Dinamito mi suelo alegremente Con tu risa me río de mi gloria Pulverizamos la complicidad con que me miro sin tus ojos Me salgo de mis pieles...

 
   Luz detenida Luz detenida de Jaime Labastida

   Jaime Labastida
      Por Jaime Labastida    
primeros versos

Hoy baila mi mujer y taja sonrientes cicatrices en su cielo. Hoy ella baila, colibrí ante la flor, espejo frente a espejos enemigo. Y la flor se habita de las plumas y el pájaro seis pétalos se vuelve. Soy un puño de tierra echado al viento. Hoy baila mi mujer y desaloja la...