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25 poemas aleatorios en audio

 
   Que dan el colirio merecido a un soberbio Que dan el colirio merecido a un soberbio de Sor Juana Inés de la Cruz

   Sor Juana Inés de la Cruz
      Por Ofelia Medina    
primeros versos

El no ser de Padre honrado, fuera defecto, a mi ver, si como recibí el ser de él, se lo hubiera yo dado. Más piadosa fue tu Madre, que hizo que a muchos sucedas: para que, entre tantos, puedas tomar el que más te cuadre...

 
   Consejos a una niña tímida o en defensa de un estilo Consejos a una niña tímida o en defensa de un estilo de Marco Antonio Montes de Oca

   Marco Antonio Montes de Oca
      Por Marco Antonio Montes de Oca    
primeros versos

Me gusta andarme por las ramas. No hay mejor camino para llegar a la punta del árbol. Por si no bastaran, me da náuseas la línea recta; prefiero el buscapiés y su febril zigzag enflorado de luces. Y cuando sueño, veo frontones apretujados de joyas donde vegetaciones de relámpagos duran hasta que enhebro en ellos conchas...

 
   Nocturno mar Nocturno mar de Xavier Villaurrutia

   Xavier Villaurrutia
      Por Carmen Montejo    
primeros versos

Ni tu silencio, duro cristal de roca, ni el frío de la mano queme tiendes, ni tus palabras secas, sin tiempo ni color, ni mi nombre, ni siquiera mi nombre que dictas como cifra desnuda de sentido; ni la herida profunda, ni la sangre que mana de sus labios, palpitante, ni la...

 
   Tu eres mi marido Tu eres mi marido de Jaime Sabines

   Jaime Sabines
      Por Juan Ignacio Aranda    
primeros versos

Tú eres mi marido y yo soy tu mujer. Tú eres mi hermana y yo soy tu hermano. Tú eres mi madre y yo soy tu hijo. Los dos somos nada más uno. Tú te abres y yo te penetro. Tú eres María y yo soy José. Tú me abrazas y yo te envuelvo. Tú eres mi sangre y yo soy tu piel. Carmen y Rosa,...

 
   Adiestramiento Adiestramiento de José Carlos Becerra

   José Carlos Becerra
      Por Julio Trujillo    
primeros versos

La voz de aquellos que asumen la noche, marinería de labios oscuros; la voz de aquellos cuyas palabras corresponden a esa luz donde el amanecer levanta la primera imagen vencida de la noche. Ahora cuando la memoria es una calle de mercaderes y héroes muertos, cuando la noche corta...

 
   A bayoneta calada A bayoneta calada  de Marco Antonio Montes de Oca

   Marco Antonio Montes de Oca
      Por Marco Antonio Montes de Oca    
primeros versos

Llegan las primeras oleadas del pueblo A encender con sus fuegos nada fatuos La mecha de mis cicatrices. Desanda el estambre La torturada extensión de los ovillos; Prodigiosamente se aclara el agua Y los frutos del muro de las nieblas A bayoneta calada son mondados. Tienen los gorros frigios Color y forma de corazón...

 
   Nocturno eterno Nocturno eterno de Xavier Villaurrutia

   Xavier Villaurrutia
      Por Alberto Dallal     
primeros versos

Cuando los hombres alzan los hombros y pasan o cuando dejan caer sus nombres hasta que la sombra se asombra cuando un polvo más fino aún que el humo se adhiere a los cristales de la voz y a la piel de los rostros y las cosas cuando los ojos cierran sus ventanas al rayo del sol...

 
   Otra carta Otra carta de Jaime Sabines

   Jaime Sabines
      Por Jaime Sabines    
primeros versos

Siempre estás a mi lado y yo te lo agradezco. Cuando la cólera me muerde, o cuando estoy triste untado con el bálsamo para la tristeza como para morirme apareces distante, intocable, junto a mí. Me miras como a un niño y se me olvida todo y ya sólo te quiero alegre, dolorosamente...

 
   Descubrimientos Descubrimientos de Eduardo Langagne

   Eduardo Langagne
      Por Eduardo Langagne    
primeros versos

colón no descubrió a esta mujer ni se parecen sus ojos a las carabelas jamás hizo vespucio un mapa de su pelo nunca un vigía gritó tierra a la vista aunque vuelan gaviotas en las proximidades de su cuerpo y en su continente se amanece cada día a esta mujer...

 
   Poema en tiempo de guerra Poema en tiempo de guerra de Jaime Labastida

   Jaime Labastida
      Por Jaime Labastida    
primeros versos

No me duele morir. Tengo hambre de tiempo, costra de las cosas, de destrucción, de lucha; somos la imagen del derrumbe, una montaña contraída de ácidos; bebemos agua serenada y un diamante es el cimiento sobre el cual construimos edificios de espuma. Apenas se puede avanzar porque...

 
   Presencia Presencia de Rosario Castellanos

   Rosario Castellanos
      Por Rosario Castellanos    
primeros versos

Algún día lo sabré. Este cuerpo que ha sido mi albergue, mi prisión, mi hospital, es mi tumba. Esto que uní alrededor de un ansia, de un dolor, de un recuerdo, desertará buscando el agua, la hoja, la espora original y aun lo inerte y la piedra. Este nudo que fui (inexplicable de cóleras, traiciones...

 
   Respeto al vino Respeto al vino de Eduardo Langagne

   Eduardo Langagne
      Por Eduardo Langagne    
primeros versos

Respeto al vino: ha esperado su momento sin angustia. Respeto su reposo en el pausado tiempo de bodega. Respeto su apego a la delicia, su paciencia a lo oscuro, su paso por las venas de un roble que pervive. Respeto su color intenso, su cascada de líquidos rubíes...

 
   Canción de la danza del arquero flechador Canción de la danza del arquero flechador de Poesía maya

   Poesía maya
      Por Enrique Lizalde (español) y Moisés Romero (maya yucateco y lacandón)    
primeros versos

Versión castellana Espía, acechador que andas cazando por los montes, una vez, dos veces, vamos a cazar a orillas de la arboleda en rápida danza, hasta tres veces. Alza bien tu frente, alista bien la mirada, no hagas errores para que alcances tu premio. ¿Tienes bien afilada la punta...

 
   Luz Luz de Jaime Labastida

   Jaime Labastida
      Por Jaime Labastida    
primeros versos

Ciego de nacimiento, me escandaliza el tacto. Vivaldi suena en medio de la bruma y la ciudad, bella hasta su colmo, intolerable, extiende dedos hacia el mar. El ancla de la vida se estremece, el sol rebasa sus medidas y entra durísimo, convicto, entre las nubes...

 
   Pasaje Pasaje de Octavio Paz

   Octavio Paz
      Por Octavio Paz    
primeros versos

Más que aire más que agua más que labios ligera ligera Tu cuerpo es la huella de tu cuerpo De: Ladera este

 
   Romance poblano Romance poblano   de Manuel Ponce

   Manuel Ponce
      Por Manuel Ponce    
primeros versos

Ante la urna que guarda los restos de Fray Sebastián de Aparicio. Aquí yace, de aquí sube en su calesa de vidrio, pues era de sal y nieve, Fray Sebastián de Aparicio. Alivio de caminantes y confesor de los lirios, príncipe de carreteros y emperador del silbido. Su cuerpo cristalizado se hace más y más chiquito...

 
   Los locos Los locos de Thelma Nava

   Thelma Nava
      Por Thelma Nava    
primeros versos

Los he visto de cerca, solemnes y magníficos, poniéndose su cuerpo cada día mientras les duele el cráneo desvestido. Los he visto en la tierra, azotándose, gusanitos de Dios sin esperanza. Colgados de la vida, con su domingo a cuestas que tarda en regresar una semana...

 
   Sonetos mayas Sonetos mayas  de Fernando Sánchez Mayans

   Fernando Sánchez Mayans
      Por Fernando Sánchez Mayans    
primeros versos

Incendio verde y sol alucinante gimen bajo la selva indescifrada. En la quietud la línea dibujada fina y sombría de un jaguar flotante. El cielo ahoga nubes rebosante para hechizarlas en su boca alada. Mientras las ruinas en su marejada inventan al silencio cada instante. Lengua de magia...

 
   Virgen hincada empieza a ser visible... Virgen hincada empieza a ser visible... de Homero Aridjis

   Homero Aridjis
      Por Homero Aridjis    
primeros versos

Virgen hincada empieza a ser visible atisba desde sus miembros como alguien escondido al fondo de su cuerpo la punta de su pie bajo su muslo asoma como un haz vivo que atraviesa la sombra en su oscuridad cuerpos vírgenes miran...

 
   Marianne Marianne de Enriqueta Ochoa

   Enriqueta Ochoa
      Por Enriqueta Ochoa    
primeros versos

Después de leer tantas cosas eruditas estoy cansada, hija, por no tener los pies más fuertes y más duro el riñón para andar los caminos que me faltan. Perdona este reniego pasajero al no encontrar mi ubicación precisa y pasarme el insomnio acodada en la ventana cuando la lluvia cae...

 
   Statu quo Statu quo de José Emilio Pacheco

   José Emilio Pacheco
      Por José Emilio Pacheco    
primeros versos

Tengo que rebelarme ante mi sumisión y someterme ante mi rebeldía. Las aguas estancadas me miran fijamente: piden que les revoque la compuerta. Lo hago. Y la piedad no alcanza su entumecimiento, su triste analogía con la mula / que rompió el círculo vicioso de la noria...

 
   Después de todo... Después de todo... de Jaime Sabines

   Jaime Sabines
      Por Jaime Sabines    
primeros versos

Después de todo pero después de todo sólo se trata de acostarnos juntos, se trata de la carne, de los cuerpos desnudos, lámpara de la muerte en el mundo. Gloria degollada, sobreviviente del tiempo sordomudo mezquina paga de los que mueren juntos. A la miseria del placer...

 
   Soy rico Soy rico de Nezahualcóyotl

   Nezahualcóyotl
      Por Raúl Dantés    
primeros versos

Soy rico, yo, el señor Nezahualcóyotl. Reúno el collar, los anchos plumajes de quetzal, por experiencia conozco los jades, ¡son los príncipes amigos! Me fijo en sus rostros, por todas partes águilas y tigres, por experiencia conozco los jades, las ajorcas...

 
   Te quiero porque tienes... Te quiero porque tienes... de Jaime Sabines

   Jaime Sabines
      Por Pilar Pellicer    
primeros versos

Te quiero porque tienes las partes de la mujer en el lugar preciso y estás completa. No te falta ni un pétalo, ni un olor, ni una sombra. Colocada en tu alma, dispuesta a ser rocío en la yerba del mundo, leche de luna en las oscuras hojas. Quizás me ves, tal vez, acaso un día, en una...

 
   Prólogo, a las puertas del paraíso Prólogo, a las puertas del paraíso   de Manuel Ponce

   Manuel Ponce
      Por Manuel Ponce    
primeros versos

La promesa El prólogo de las Vírgenes se terminó en una noche. Dios, sin tinta ni papel, le dio cuerpo cimbreante de voces, y todos sus caracteres de fuego tres veces joven quedaron en la serpiente y dos malogrados dioses. Porque podéis, si queréis, comprender, aguas salobres, repasad, a los principios...