☰ menú
 


25 poemas aleatorios en audio

 
   Carta a Jesús Arellano Carta a Jesús Arellano de Enriqueta Ochoa

   Enriqueta Ochoa
      Por Enriqueta Ochoa    
primeros versos

Desde hace años, Jesús, el corazón me rebota loco entre las sienes y ando por los rincones escondiendo al sollozo. Estreno una sonrisa cada mañana y pido limosna en todas las esquinas, porque ¿quién va a prestarme su vida, su amor, o su Dios? Tengo que comprármelos yo misma, y no me alcanza...

 
   Llano Llano de Octavio Paz

   Octavio Paz
      Por Octavio Paz    
primeros versos

El hormiguero hace erupción. La herida abierta bortotea, espumea, se expande, se contrae. El sol a estas horas no deja nunca de bombear sangre, con las sienes hinchadas, la cara roja...

 
   León Felipe en sus 75 años León Felipe en sus 75 años de Luis Rius Azcoita

   Luis Rius Azcoita
      Por Juan Rejano    
primeros versos

Vedlo otra vez aquí. De su vieja piel brotan absurdamente flores en salvaje melena enmarañadas: recientes, frescas, olorosas flores (así Elvira Gascón lo ha dibujado). Y de la cueva honda de su boca a veces una voz terrible sale clamando; voz oscura que, inesperadamente traicionada,...

 
   Valle de México Valle de México de Octavio Paz

   Octavio Paz
      Por Octavio Paz    
primeros versos

El día despliega su cuerpo transparente. Atado a la piedra solar, la luz me golpea con sus grandes martillos invisibles. Sólo soy una pausa entre una vibración y otra: el punto vivo, el afilado, quieto punto fijo de intersección de dos miradas que se ignoran y se encuentran en mí. ¿Pactan? ...

 
   Lubina Lubina de Juan Rulfo

   Juan Rulfo
      Por Juan Rulfo    
primeros versos

De los cerros altos del sur, el de Luvina es el más alto y el más pedregoso. Está plagado de esa piedra gris con la que hacen la cal, pero en Luvina no hacen cal con ella ni le sacan ningún provecho. Allí la llaman piedra cruda, y la loma que sube hacia Luvina la nombran Cuesta de la Piedra Cruda...

 
   Mano Mano de Griselda Álvarez Ponce de León

   Griselda Álvarez Ponce de León
      Por Griselda Álvarez Ponce de León    
primeros versos

Mejor el agua que en tu cuenco tomas, mejor la lumbre si por ti se enciende o el ruto que contigo se desprende o el seno que en tus dedos empalomas. Mucho mejor el pan si en él asomas, mejor la piedra que por ti se hiende o el campo cultivado en que trasciende el tacto vegetal con que te aromas...

 
   Fin presente Fin presente de Oscar Oliva

   Oscar Oliva
      Por Oscar Oliva    
primeros versos

Está en lo que comemos y bebemos, en los trabajos que nos dan de comer y beber, en los alimentos en los que no nos reconocemos y en la ineptitud con la que nos destrozamos las manos a la hora del hambre para poder tomar asiento y comenzar de nuevo con lo que está en la mesa...

 
   Certeza Certeza de Octavio Paz

   Octavio Paz
      Por Octavio Paz    
primeros versos

Si es real la luz blanca de esta lámpara, real la mano que escribe, ¿son reales los ojos que miran lo escrito? De una palabra a la otra lo que digo se desvanece. Yo sé que estoy vivo entre dos paréntesis. De: Días hábiles

 
   En el umbral de la plegaria (fragmento) En el umbral de la plegaria (fragmento) de Marco Antonio Montes de Oca

   Marco Antonio Montes de Oca
      Por Marco Antonio Montes de Oca    
primeros versos

Ahora estamos despiertos, ya no permitimos nada, no accedemos a nada, y si una flor desprendida del espino blanco nos cruza el rostro, acariciándolo con el leve tamborileo de una mariposa vespertina; nos echamos hacia atrás, ponemos en guardia repentinos enjambres...

 
   Auge y destrucción de un hechizo Auge y destrucción de un hechizo  de Marco Antonio Montes de Oca

   Marco Antonio Montes de Oca
      Por Marco Antonio Montes de Oca    
primeros versos

Por un momento el tiempo suspende su peregrinaje, se libera, abre una tregua, funda cabezas de playa en el silencio y ya no lo fustigan más las ruinas enamoradas del presente. Es tan unitaria la visión, de tal modo se ha trabado lo que existe con sus picos, ruedas, garfios...

 
   Federico García Lorca Federico García Lorca de Luis Rius Azcoita

   Luis Rius Azcoita
      Por Juan Rejano    
primeros versos

A lo oscuro corrías de los bosques, huyendo. Se llevaba tu sombra la mañana herida por el fuego, y a tu voz la arrojaban en un pozo profundamente negro. ¿Dónde podías ir tú sin voz ni sombra? ¿Dónde esconder la muerte de tu cuerpo? a lo oscuro corrías de los bosques, huyendo...

 
   Turner´s landscape Turner´s landscape de José Emilio Pacheco

   José Emilio Pacheco
      Por José Emilio Pacheco    
primeros versos

Hay demasiada primavera en el aire. El excesivo fasto augura la pobreza. Nadie puede guardar unos segundos de esta tarde para alumbrarse en el invierno (yo oigo la impugnación de las hormigas). El campo de Inglaterra es un jardín ilimitado...

 
   Hervor de calles... Hervor de calles... de Rubén Bonifaz Nuño

   Rubén Bonifaz Nuño
      Por Rubén Bonifaz Nuño    
primeros versos

Hervor de calles; desembocadura de pábulos ardiendo, en la caldera sediciosa del mísero. Como hierba de gritos, como en humo lumbrarada de pelos espantados; como chubasco tupidísimo y turbio, en ascensión. Así llegaba. Y alégrate si nadie, en esta plaza, si nadie, de tan juntos y de...

 
   Señora Lexotán Señora Lexotán de Enzia Verduchi

   Enzia Verduchi
      Por Enzia Verduchi. Música de Plug    
primeros versos

Qué son seis miligramos tres veces al día si con ello se pueden anestesiar los sentimientos, si controla la ansiedad del todo. No ríes, no lloras, no percibes ni el principio ni el fin del mundo. Basta con abrir la boca: el ama de casa no es indecisa ante la gama del supermercado;...

 
   He allí la vida He allí la vida de Jaime Augusto Shelley

   Jaime Augusto Shelley
      Por Jaime Augusto Shelley    
primeros versos

No se ama mucho o poco. Se entrega uno, decididamente, en un abrazo que dura toda la vida al ser que palpita en el encuentro: puede cambiar la persona, el ser sigue siendo el mismo. No se ama a veces, o porque sí. Se es siempre ese otro hecho vida presente y temporal. El amor no...

 
   Me preocupa el televisor... Me preocupa el televisor... de Jaime Sabines

   Jaime Sabines
      Por Jaime Sabines    
primeros versos

Me preocupa el televisor. Da imágenes distorsionadas últimamente. Las caras se alargan de manera ridícula, o se acortan, tiemblan indistintamente, hasta volverse un juego monstruoso de rostros inventados, rayas, luces y sombras como en una pesadilla. Se oyen palabras claramente, la...

 
   Fuego en voz alta para encender la primavera Fuego en voz alta para encender la primavera de Efraín Bartolomé

   Efraín Bartolomé
      Por Efraín Bartolomé y el canto extático de los derviches    
primeros versos

Vibro Estoy cantando Ilumino la oscuridad cantando De la fruta ligeramente amarga del corazón se levantan delgadas capas de una suave corteza Capas ligeras como el aroma que se desprende bajo el sol de un paquete compacto de grandes hojas de tabaco Estoy cantando Me descubro...

 
   De tu ligera planta... De tu ligera planta... de Sor Juana Inés de la Cruz

   Sor Juana Inés de la Cruz
      Por Dámaso Alonso, Eulalia Galvarriato, Eulalia Soldevilla, Luis Miguel y Rosalía Payno    
primeros versos

De tu ligera planta el curso, Fenix rara, pára, pára; mira que se adelanta, en tan ligero ensayo, a la nave, a la cierva, al ave, al rayo. ¿Por qué surcas ligera el viento transparente? Tente, tente, consuélanos siquiera; no nos lleves contigo el consuelo, el amparo, el bien y abrigo...

 
   El pobre El pobre de Rosario Castellanos

   Rosario Castellanos
      Por Rosario Castellanos    
primeros versos

Me ve como desde un siglo remoto, como desde un estrato geológico distinto. Del idioma que algunos atesoran le dieron de limosna una palabra para pedirle su pan y otra para dar gracias. Ninguna para el diálogo. El domador, con látigo y revólveres, le enseña a hacer piruetas...

 
   Mala fe Mala fe de Rosario Castellanos

   Rosario Castellanos
      Por Rosario Castellanos    
primeros versos

Ni el cielo constelado de estrellas ni la ley moral, urdida en la raíz del hombre. No, a diferencia exacta de Kant, no me suscitan tales contemplaciones tales meditaciones, maravilla o asombro. Me conmueve más bien la vastedad del espacio, la inmensa magnitud de los tiempos y las...

 
   Ahora Ahora de Jaime Torres Bodet

   Jaime Torres Bodet
      Por Jaime Torres Bodet    
primeros versos

Ahora que las últimas cohortes incendiaron las últimas praderas, en esta soledad de mármol roto, de lámparas extintas y de palabras yertas; sobre un polvo que fue tribuna o plinto, corona de palacio o tímpano de iglesia; mientras el odio se organiza para un asedio...

 
   Noche y nieve Noche y nieve de José Emilio Pacheco

   José Emilio Pacheco
      Por José Emilio Pacheco    
primeros versos

Me asomé a la ventana y en lugar de jardín hallé la noche enteramente constelada de nieve La nieve hace tangible el silencio y es el desplome de la luz y se apaga La nieve no quiere decir nada: Es sólo una pregunta que deja caer millones de signos de interrogación sobre el mundo...

 
   La enredadera La enredadera de José Emilio Pacheco

   José Emilio Pacheco
      Por José Emilio Pacheco    
primeros versos

Verde o azul, fruto del muro, crece; divide cielo y tierra. Con los años se va haciendo más rígida, más verde, costumbre de la piedra, cuerpo ávido de entrelazadas puntas que se tocan; llevan la misma savia, son una breve planta y también son un bosque; son los años que se anudan y rompen...

 
   Elegías del amado fantasma (Primera elegía) Elegías del amado fantasma (Primera elegía) de Rosario Castellanos

   Rosario Castellanos
      Por Carmen Farías    
primeros versos

Inclinada, en tu orilla, siento como te alejas. Trémula como un sauce contemplo tu corriente formada de cristales transparentes y fríos. Huyen contigo todas las nítidas imágenes, el hondo y alto cielo, los astros inventados, la vehemencia ingrávida del canto...

 
   Detente sombra Detente sombra de Sor Juana Inés de la Cruz

   Sor Juana Inés de la Cruz
      Por Ofelia Medina    
primeros versos

QUE CONTIENE UNA FANTASÍA CONTENTA CON AMOR DECENTE Detente, sombra de mi bien esquivo, imagen del hechizo que más quiero, bella ilusión por quien alegre muero, dulce ficción por quien penosa vivo. Si al imán de tus gracias, atractivo, sirve mi pecho de obediente acero, ¿para qué me...