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25 poemas aleatorios en audio

 
   Cuatro cantos de mi tierra Cuatro cantos de mi tierra de Carlos Pellicer

   Carlos Pellicer
      Por Luis Illán Torralba    
primeros versos

Tabasco en sangre madura y en mi su poder sangró. Agua y tierra el sol se jura; y en nubarrón de espesura la joven tierra surgió. Tus hidrógenos caminos a toda voz transité y en tu oxígeno silbé mis pulmones campesinos. A puños sembré mi vida de tu fuerza vendaval que azúcar cañaveral espolvorea en la huida...

 
   Marianne Marianne de Enriqueta Ochoa

   Enriqueta Ochoa
      Por Enriqueta Ochoa    
primeros versos

Después de leer tantas cosas eruditas estoy cansada, hija, por no tener los pies más fuertes y más duro el riñón para andar los caminos que me faltan. Perdona este reniego pasajero al no encontrar mi ubicación precisa y pasarme el insomnio acodada en la ventana cuando la lluvia cae...

 
   Romance apócrifo Romance apócrifo   de Manuel Ponce

   Manuel Ponce
      Por Manuel Ponce    
primeros versos

Es el lirio nazareno, lo difícil de la hora, reyes sin fruto, el inútil degüello de la paloma. Paisajes de Mediodía, barnices de dura goma izan brocales antiguos, frescos tópicos de sombra. Hojas de plata caían sonando por la memoria del apóstol mineral cargado con las alforjas. Pero Jesús sueña un lago de soledades...

 
   Oración en la entraña quemada de un sabino Oración en la entraña quemada de un sabino de Efraín Bartolomé

   Efraín Bartolomé
      Por Efraín Bartolomé y el canto extático de los derviches    
primeros versos

Éste es mi territorio más secreto: he amado a la Diosa. Fui Acteón y soy el corzo ya. Huyo entre matorrales y mi propia manada me persigue: hiere mi amante piel. Con ladridos aún, pero mi entraña sabe que no tardarán mucho en darme alcance.9675; Los matorrales, los ladridos y la...

 
   A veces A veces de Fayad Jamís

   Fayad Jamís
      Por Fayad Jamís    
primeros versos

A veces, en el silencio del pasillo, algo salta, rompe alguien algún viejo nombre. La mosca enloquecida cruza zumbando, ardiendo lejos de la telaraña luminosa. Esto es así, tan solo; pero tan lleno de sorpresas. Caserón de fantasmas sin hijos, en l polvo hace nuevas ventanas, nuevos muebles y danzas...

 
   El otro El otro de Rosario Castellanos

   Rosario Castellanos
      Por Rosario Castellanos    
primeros versos

Por qué decir nombres de dioses, astros espumas de un océano invisible, polen de los jardines más remotos? Si nos duele la vida, si cada día llega desgarrando la entraña, si cada noche cae convulsa, asesinada.

 
   Continúa el asunto y aun le expresa con más viva elegancia Continúa el asunto y aun le expresa con más viva elegancia de Sor Juana Inés de la Cruz

   Sor Juana Inés de la Cruz
      Por Guadalupe (Pita) Amor    
primeros versos

Feliciano me adora y le aborrezco; Lisardo me aborrece y yo le adoro; por quien no me apetece ingrato, lloro, y al que me llora tierno, no apetezco: a quien más me desdora, el alma ofrezco; a quien me ofrece víctimas, desdoro; desprecio al que enriquece mi decoro y al que le hace...

 
   Auschwitz no fue el jardín de mi infancia Auschwitz no fue el jardín de mi infancia de Fayad Jamís

   Fayad Jamís
      Por Fayad Jamís    
primeros versos

Auschwitz no fue el jardín de mi infancia. Yo crecí entre bestias y yerbas y en mi casa la pobreza encendía su candil en las noches. Los árboles se cargaban de nidos y de estrellas, por los caminos pasaba asustándose una yegua muy blanca. Auschwitz no fue el jardín de mi infancia...

 
   Sonetos postreros Sonetos postreros de Carlos Pellicer

   Carlos Pellicer
      Por Carlos Pellicer    
primeros versos

Mi voluntad de ser no tiene cielo; sólo mira hacia abajo y sin mirada. ¿Luz de la tarde o de la madrugada? Mi voluntad de ser no tiene cielo. Ni la penumbra de un hermoso duelo ennoblece mi carne afortunada. Vida de estatua, muerte inhabitada sin la jardinería de un anhelo. Un dormir sin soñar...

 
   Qué hago con mi corazón... Qué hago con mi corazón... de Eduardo Langagne

   Eduardo Langagne
      Por Eduardo Langagne    
primeros versos

Qué hago con mi corazón? ¿Lo dejo que siga inquieto? ¿Lo impugno duro? ¿Lo reto? ¿Lo incluyo en esta canción? Cuando toda su expresión es separarse de mí y hacer todo para sí sin ni siquiera inmutarse ¿Cómo pudo enamorarse si yo no se lo pedí?...

 
   Patria amaneciendo Patria amaneciendo de Jaime Augusto Shelley

   Jaime Augusto Shelley
      Por Jaime Augusto Shelley    
primeros versos

De la semana escoge algo venido de lunes con vaciedad atropellada. Di que esa mañana saliste a la calle buscando decir, dejar de lado, estallar con todos, cargado de eso que fue y nunca acaba. Martes lumínico, crecido dentro, vida de otros, ahora tuya. Al salir, imagina que no es martes...

 
   Credo Credo de Ricardo López Méndez

   Ricardo López Méndez
      Por Carmen Feito Maeso    
primeros versos

México, creo en ti, Como en el vértice de un juramento. Tú hueles a tragedia, tierra mía, Y sin embargo, ríes demasiado, A caso porque sabes que la risa Es la envoltura de un dolor callado.México, creo en ti, Sin que te represente en una forma Porque te llevo dentro, sin que sepa Lo que tú eres en mí...

 
   Idilio salvaje Idilio salvaje de Manuel José Othón

   Manuel José Othón
      Por Claudio Obregón y Gastón Melo    
primeros versos

A fuerza de pensar en tus historias y sentir con tu propio sentimiento, han venido a agolparse al pensamiento rancios recuerdos de perdidas glorias. Y evocando tristísimas memorias, porque siempre lo ido es triste, siento amalgamar el oro de tu cuento de mi viejor román con las escorias...

 
   Indagación en torno del murciélago Indagación en torno del murciélago de José Emilio Pacheco

   José Emilio Pacheco
      Por José Emilio Pacheco    
primeros versos

Los murciélagos no saben una palabra de su prestigio literario. Con respecto a la sangre, les gusta la indefensa de las vacas, útiles señoronas incapaces de fraguar un collar de ajos, una estaca en el pecho, un crucifijo; pues tan sólo responden a la broma sangrienta, al beso impuro...

 
   Su trenza Su trenza de Amado Nervo

   Amado Nervo
      Por Enrique Rambal    
primeros versos

Bien venga, cuando viniere, la Muerte: su helada mano bendeciré si hiere... He de morir como muere un caballero cristiano. Humilde, sin murmurar, ¡oh Muerte!, me he de inclinar cuando tu golpe me venza; ¡pero déjame besar, mientras expiro, su trenza! ¡la trenza que le corté y que, piadoso, guardé...

 
   Frente Frente de Griselda Álvarez Ponce de León

   Griselda Álvarez Ponce de León
      Por Griselda Álvarez Ponce de León    
primeros versos

Si detrás de tu frente cristaliza el principio de todo; si a su puerta permanente de par en par abierta un invisible rayo se entroniza, como un oscuro dios tasa y revisa la propia destrucción que lo liberta, porque allí nace, muere y se concierta tu pensamiento esclavo de la prisa...

 
   Los he visto en el cine... Los he visto en el cine... de Jaime Sabines

   Jaime Sabines
      Por Jaime Sabines    
primeros versos

Los he visto en el cine, frente a los teatros, en los tranvías y en los parques, los dedos y los ojos apretados. Las muchachas ofrecen en las salas oscuras sus senos a las manos y abren la boca a la caricia húmeda y separan los muslos para invisibles sátiros. Los he visto quererse...

 
   Nocturno sueño Nocturno sueño de Xavier Villaurrutia

   Xavier Villaurrutia
      Por Alberto Dallal     
primeros versos

Abría las salas profundas el sueño y voces delgadas corrientes de aire entraban Del barco del cielo del papel pautado caía la escala por donde mi cuerpo bajaba El cielo en el suelo como en un espejo la calle azogada dobló mis palabras Me robó mi sombra la sombra cerrada...

 
   Al Niño Divino que llora en Belén... (Villancico II) Al Niño Divino que llora en Belén... (Villancico II) de Sor Juana Inés de la Cruz

   Sor Juana Inés de la Cruz
      Por Grupo: Teatro 61    
primeros versos

Estribillo Al Niño divino que llora en Bélen, ¡déjen-lé, pues llorando mi mal, consigo mi bien! 1.- ¡Déjen-lé, que a lo Criollito yo le cantaré! 2.- ¡Le, le, que le, le le! Coplas 1.- Sed tiene de penas Dios, y es bien le den sus ojos el agua, el barro mi ser: ¡déjen-lé! 2.- Dejen...

 
   En los ojos abiertos de los muertos... En los ojos abiertos de los muertos... de Jaime Sabines

   Jaime Sabines
      Por Jaime Sabines    
primeros versos

En los ojos abiertos de los muertos ¡qué fulgor extraño, qué humedad ligera! Tapiz de aire en la pupila inmóvil, velo de sombra, luz tierna. En los ojos de los amantes muertos el amor vela. Los ojos son como una puerta infranqueable, codiciada, entreabierta. ¿Por qué la muerte...

 
   Las vírgenes del sueño Las vírgenes del sueño   de Manuel Ponce

   Manuel Ponce
      Por Manuel Ponce    
primeros versos

Las vírgenes arrastran una sombra, habitan una sombra. No podrían arrastrar otra cosa. Las vírgenes sin esclavinas llevan contorno de fluidos, galvanizada sombra. Pero ya nimbo, sombra misma, la sombra de su sombra: cosa limpia. Pasan de vez en cuando, tangentes de la rosa y el querube, por un relieve de celistias...

 
   El ídolo en el atrio El ídolo en el atrio de José Juan Tablada

   José Juan Tablada
      Por Sergio de Alva    
primeros versos

Una Piedra del Sol sobre el cielo de la mañana asoma en lo alto el ancho rostro de basalto a la orilla de un charco de obsidiana y parece que su boca vierte un reguero de sangre humana y zempazúchiles de muerte... Es del trigo del sol la gran piedra molar que hace el pan de los días...

 
   Por qué me quité del vicio Por qué me quité del vicio de Carlos Rivas Larrauri

   Carlos Rivas Larrauri
      Por Manuel Bernal    
primeros versos

No es por hacerles desaigre... Es que ya no soy del vicio... Astedes mi lo perdonen, pero es qui hace más de cinco años que no tomo copas, onqui ande con los amigos... ¿Qué si no me cuadra?...¡Harto! Pa que he di hacerme el santito: he sido reteborracho; ¡como pocos lo haigan sido!...

 
   Lo cotidiano Lo cotidiano de Rosario Castellanos

   Rosario Castellanos
      Por Rosario Castellanos    
primeros versos

Para el amor no hay cielo, amor, sólo este día; este cabello triste que se cae cuando te estás peinando ante el espejo. Esos túneles largos que se atraviesan con jadeo y asfixia, las paredes sin ojos, el hueco que resuena de alguna voz oculta y sin sentido. Para el amor no hay...

 
   Estos vientos de marzo y febrero... Estos vientos de marzo y febrero... de Enriqueta Ochoa

   Enriqueta Ochoa
      Por Enriqueta Ochoa    
primeros versos

Estos vientos de marzo y febrero, ¡ay, estos vientos!, estos vientos espesos de vida que fecundan el vientre de la primavera, me han traído noticias que derrumbaron con seco trueno los muros de mi vida.