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JUAN BAÑUELOS


listado de poemas

 
Brazo de mar

Más quieta y casta que una justa balanza, o encendida como un puño apretado, sobre la osamenta del día estalla tu sangre que solloza sorprendida. Tierna o terrible, como el pájaro o la espada, he aquí que no puedo estrecharte. Estás prohibida, mujer, ferocidad de muerta; pared que canta...

Contrafuga de la muerte

Si vamos a tender un cable de exorcismo, si vamos a alquilar los versos para bodas, primeras comuniones, funerales y bautizos, recojo mis papeles. Y me voy. Si vamos a leer como leemos, palabras al amado fantasma y otros espejismos, entonces me retiro. Nosotros esperamos el tren que...

Densa luz del trópico

Hay burbujas de frutas en el olor del día. El verdeoscuro de la tarde entra a zancadas por el patio y se funde con el pequeño remolino que en medio del jardín hace girar las hojas como astros de un sistema solar sobre la ropa tendida. Contemplamos la jarra de agua y a un lado el cuchillo...

Donde los dioses son más viejos que los astros

Pronto de corazón, descalzo, como en mi infancia rodeado de sabinos, como el hombre se inclina sobre el vientre de la esposa y se escucha él mismo nacer, oh hachas de la cólera, esto no es un sueño. Desmemoriadas mis manos pesan sobre esta llaga asida, y sobre el limo limo...

Donde sólo se habla del amor

A los hombres, a las mujeres que aguardan vivir sin soledad, al espeso camaleón callado como el agua, al aire arisco (es el aire un pájaro atrapado), a los que duermen mientras sostengo mi vigilia, a la mujer sentada en la plaza vendiendo su silencio. En fin, diciendo ciertas cosas ...

Enero era la hierba

El sur está en mis lágrimas mientras la lluvia piensa en mis ausentes. Las alas del más pequeño pájaro se pierden en la boca del viento y tú, mi hora augural, desciendes tímida entre tantos recuerdos. Aquí están todos. Vienen reunidos por el tiempo, cojeando entra la niebla...

Es un buen día para morir

Un ominoso escarnio de puñales encapota los ojos del suburbio. Tiembla el tiempo y el patio y en el turbio lodazal suenan tiros policiales. Sangre, polvo, terror, caries dentales desafían la muerte. Y el disturbio deslizándose en un cuchillo gurbio en la esquina madrea sus vocales. Sombras...

Fondo de agua

Descendemos. Debajo de mi piel tú cantas y en la última curva de mis venas con un tropel de polen te despides. Un día estás en mis ojos bajo un ruido de llamas, otro día duermes como la niebla junto a mi sombra agazapada. Si supieras que llegas y en tu mano está a punto...

Habitante amoroso

Apenas la noche ha cerrado su sombra completa. Lo que suena después no es el río Ni las hojas del aire ni el pez de la niebla. Es la hambrienta distancia que llega rompiendo las aguas y el monte que cede al recuerdo y te nombra. Lo que el tiempo nos niega, lo que arranca el deseo, lo que...

Hojamarga

Hija del campo y de la luz/ vientre de piedra sollamada/ nunca se elevó tan bajo tu hambre/ tu sombra sin su cuerpo/ la impostura/ la ceniza de tus trojes quemadas/ el látigo/los nadies de la sed... -qué sé yo qué!- Y a punto de salpicar está la sangre estando fraternal estaba ...

Los caminos de toda carne

Si a la mitad del camino de tu vida aparece una mujer joven y se entrega a ti jadeante / y despierta en tus brazos el peso insonoro voluptuoso de tierra de otros cuerpos que sin más resucitan / y después...

Mutaciones

Un Coyote Emplumado es más que un lobo sin manada es menos que un árbol sin raíces es más que el aire sin ninguna fronda menos que esa puerta que la cierra el viento es más que un río arrastrando troncos y animales menos que un ciervo yugulado en la espesura es más ...

No consta en actas

Oh, bebedor de la noche, ¿por qué te disfrazas ahora? ¿Todo es igual acaso? ¿Tengo que repetir lo que el augur grabó en el silencio de la piedra curtida por el viento? “...esparcidos están los cabellos, destechadas las casas, enrojecidos...

Noticia

Cada día al llegar a la oficina Saludamos con ese ademán Dejado a la costumbre, Nos miramos la risa polvorienta, Queremos que alguien hable por teléfono Y callamos. Los días van escribiendo en nosotros, Nos sellan como actas de juzgado Y luego hablamos de ellos Como...

Perversidad de la separación

Desautorizomi ternura / vuélvansemis ojos turbulencia / pido castigo ejemplar a mis palabras. al alba quito la escalera para que ninguna luz suba a las ventanas / que sea irreflexivacomo un perromi bondad que en los charcos sean glorificados mis instintos que la vida tropiece ...

Redoble bajo una ceiba

Padre anciano, Obrero y gran señor, Sesenta y nueve ramas se han secado En tu arbolado corazón. Padre, es claro. Yo acecho tu bastión: Me abro paso entre cedros y álamos Cuando, de pronto, soy la multitud hambrienta de una calle Aherrojada en cilicios de terror. Padre obrero, Obrero...

Sitios

Andenes agobiados por la carga y descarga de mercancías que suenan como cráneos. Techos de nubes como tifones aún dormidos. Uno descansa al horizonte como un vaso de aguardiente sobre una mesa lacónica y de cedro. Aquél devana una madeja de liendres instantáneas. El ojo...

Un albañil llega a su casa

Un albañil ) ( llega a su casa. Mírenme. Estoy borracho. 0 estoy casi borracho. Descalzo. Amanece. Remordimiento Recién llegado al aguardiente. Ahora sabemos que una piedra sin sonido Pesa en nuestras ropas. Acato lo que me dice mi madre. No estoy seguro pero es...